
La mala calidad de la energía, caracterizada por fluctuaciones y/o voltajes persistentemente bajos o altos, tiene consecuencias de largo alcance y debería recibir mucha más atención. Al igual que la falta de acceso, la mala calidad de la energía frena el crecimiento económico. Pero es mucho más difícil de rastrear y se desconoce su prevalencia porque no existen sistemas para medirla. Instalamos sensores en toda Nigeria para evaluar la calidad de la energía y sus impactos en las personas y la actividad económica.
â La inversión actual es miope: La métrica principal de los objetivos globales de pobreza energética, como el Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 (ODS7), es la tasa de acceso a la electricidad. Esto ha llevado a una mayor inversión e investigación centradas en ampliar el número de conexiones dentro y fuera de la red (consulte el programa Power Africa de EE. UU. como ejemplo). Sin embargo, miles de millones de clientes de electricidad, muchos de ellos recién conectados, enfrentan desafíos para utilizar eficazmente sus conexiones debido a cortes de energía frecuentes e impredecibles y períodos intermitentes y sostenidos de electricidad insegura o inutilizable, lo que en última instancia sofoca el consumo y el crecimiento económico.
â Se subestima el alcance del problema: Si bien se sabe que los cortes de energía son un problema importante para los usuarios de electricidad en las regiones en desarrollo, la mala calidad de la energía puede estar aún más extendida. Las empresas de servicios públicos, los formuladores de políticas, los investigadores y las partes interesadas clave en el sector eléctrico a menudo subestiman la escala y la profundidad de la mala calidad de la energía, lo que dificulta la adopción de medidas efectivas para abordarla.
â Los problemas de calidad invisibles pueden socavar gravemente los esfuerzos de desarrollo: La mala calidad de la energía genera una variedad de problemas, desde la supresión de la demanda y daños en los electrodomésticos hasta una disminución de la productividad y riesgos para la seguridad o la salud. Estos problemas están muy extendidos en las economías en desarrollo, como las del África subsahariana, donde la envejecida infraestructura de la red tiene una capacidad limitada. Estos problemas de calidad de la energía afectan a múltiples industrias, sofocando el desarrollo económico y social.
â No existe ningún esfuerzo coherente para abordar este problema: Las empresas de servicios públicos y los formuladores de políticas no cuentan con las herramientas o políticas adecuadas para identificar y mejorar los problemas de calidad de la energía. Un primer paso esencial es garantizar mediciones consistentes y universales de la calidad de la energía para evaluar la escala y el alcance del problema. Incluso con una mejor detección, el grado en que la mala calidad de la energía suprime la demanda (por ejemplo, si desalienta a las personas a invertir en electrodomésticos y consumir electricidad) sigue sin verse, y puede ser aún más difícil medirlo de manera efectiva, lo que requiere encuestas y estudios de casos históricos. . La persistente mala calidad impide el uso generalizado de la electricidad con fines productivos y constituye un lastre para el crecimiento económico y el desarrollo equitativo.
Nigeria Nigeria es la economía más grande de África y está en camino de convertirse en el tercer país más poblado del mundo para 2047. Sin embargo, como en muchas otras economías en desarrollo, el suministro inadecuado de energía es una barrera importante para el progreso económico. e-GUIDE llevó a cabo una auditoría energética en 74 mercados comerciales en las seis regiones de Nigeria donde instalamos los sensores PowerWatch de nline para monitorear la calidad de la energía y la confiabilidad de la red. Encontramos:
â Calidad y confiabilidad de la energía: En los 74 mercados, solo 1 de cada 4 lecturas de voltaje estaban en un rango "aceptable" (dentro del 10 % del voltaje de red estándar). Si bien hubo interrupciones en 1 de cada 3 muestras, los voltajes extremadamente bajos fueron más frecuentes (aproximadamente 2 de cada 5 muestras; consulte la Figura 1).
â Impacto de la mala calidad en los electrodomésticos: Los electrodomésticos en estos mercados funcionan con voltajes extremadamente bajos la mayor parte del tiempo. Esto provoca daños, una vida útil reducida y un rendimiento poco confiable, y obliga a las empresas a lidiar con operaciones deficientes o comprar reemplazos, lo que reduce las ganancias en cualquier caso.
â Supresión de demanda: Las empresas no están operando a su máximo potencial debido a la demanda reprimida. Por ejemplo, el propietario de una berlina tuvo que devolver una segunda unidad de aire acondicionado porque el voltaje empeoraba cuando se utilizaban varios electrodomésticos. Otro propietario de negocio destacó que los clientes de una línea compartida a menudo no pueden hacer funcionar electrodomésticos como calentadores, refrigeradores o ventiladores sin cortar el suministro eléctrico. Estas restricciones obstaculizan el crecimiento y son difíciles de tener en cuenta en los procesos de planificación de la red.
â Efecto en el comportamiento: Como resultado de la mala calidad y el suministro de energía poco confiable, las empresas recurren a incurrir en costos adicionales al depender de otras fuentes de energía. Por ejemplo, el 23% de las empresas conectadas a la red también tenían generadores personales o compartidos, lo que no sólo añade costos adicionales sino que también presenta enormes preocupaciones ambientales. 1 Además, las empresas se ven obligadas a invertir en sistemas de protección como protectores contra sobretensiones y estabilizadores de voltaje. sistemas eléctricos, mejora de la red, equipos médicos, energía confiable, alta calidad, factor de potencia, alta tecnología, energía renovable, fallas de equipos
Figura 1: Porcentaje de voltaje medido por hora del día
Estos hallazgos de Nigeria son consistentes con mediciones tomadas en asentamientos informales de Uganda, comunidades rurales en Kenia y ciudades de toda la India, entre otros. Mientras el mundo se esfuerza por cumplir el ODS 7 y lograr el acceso universal a una energía asequible, confiable, sostenible y moderna, es crucial que adoptemos una visión a más largo plazo y pensemos más allá del acceso a la electricidad y comencemos a utilizar filtros de armónicos activos. . Las empresas de servicios públicos necesitan inversiones para garantizar mediciones más amplias y frecuentes, los formuladores de políticas y los reguladores deben hacer preguntas sobre la experiencia de los clientes de electricidad, y los gobiernos, donantes e inversores deben reconocer que la mala calidad de la energía es un tema prioritario que pone en peligro el impacto social y el valor financiero de sus inversiones en infraestructura eléctrica. En resumen: la mala calidad de la energía es un impedimento crucial para el desarrollo económico sostenible, y debemos prestarle más atención.
suscríbase a nosotros para disfrutar de los precios del evento y obtener algunos de los mejores precios.